"Hoy ha sido el día más terrorífico de toda mi vida. Iris estaba viendo unos dibujos animados divertidos mientras cenaba. No era nada fuera de lo normal, pero acababa de levantar la vista para pedirle que tuviera cuidado con reírse demasiado mientras comía porque podía atragantarse. Antes de que pudiera pronunciar las palabras, ella hizo exactamente lo que me preocupaba. Inhaló de forma espectacular y la comida que estaba masticando se le atascó en la garganta. Su cara se puso roja casi al instante y el pánico en su rostro perseguirá mis sueños durante un tiempo. Inmediatamente empecé a darle palmaditas en la espalda y pasé a la maniobra de Heimlich. No funcionaba y empezó a quedarse flácida en mis brazos. Mi marido ya estaba agarrando y abriendo el @dechoker que compré hace sólo 3 meses. Tardó unos 6 segundos en abrirlo, metérselo en la boca y sacarle un trozo de carne de la garganta.

Oírla tomar una enorme bocanada de aire y empezar a llorar fue un milagro. Mi pobre niña estaba muy asustada y no sé cómo a su padre y a mí no nos dio un infarto. Estuve muy cerca de ello y me senté sollozando en el suelo y dando gracias a Dios durante un buen rato. Vi este dispositivo médico de pasada, pensé al azar que parecía una idea inteligente pero seguí adelante. Algo me estuvo dando la lata durante el resto de la tarde de ese día y no podía quitarme la sensación de que tenía que comprar uno por si acaso. Al final fui a buscarlo esa noche y pedí dos. Pensaba comprar sólo uno para el bebé porque Luna aún no es la mejor masticando, pero acabé comprando uno para Iris también por si acaso. No hace falta decir que estoy muy contenta de haber comprado estos y recomiendo comprar uno a TODOS mis amigos padres. No puedo agradecer lo suficiente a la gente que hizo el Dechoker por hacer este dispositivo y por salvar la vida de mi hija de 4 años. Estaremos siempre agradecidos por su producto. GRACIAS DIOS!"