"Compré el Dechoker hace un tiempo para mi esposa con la enfermedad de Parkinson. Hoy le ha salvado la vida. Este es el mensaje que envié a nuestros familiares y amigos: Hoy nos hemos llevado un buen susto antes de que llegara la señora del hospicio. Lori estaba comiendo sopa sentada en la cama cuando tuvo que tumbarse porque estaba alucinando. Pensábamos que se lo había tragado todo, pero de repente parecía asustada, así que la volví a colocar en la cama ajustable. No le entraba aire y yo no podía darle una palmada en la espalda ni levantarla para la Heimlich. Gracias a Dios que teníamos el Dechoker, corrí a por él y le sacó un trozo de pollo de la garganta". - Steve J.