Los padres nos preguntan a menudo si tenemos algún consejo para prevenir los atragantamientos. Aunque siempre estamos dispuestos a dar consejos sobre los peligros domésticos, lo cierto es que, con diferencia, la causa más frecuente de atragantamiento es la comida.

Los niños pequeños corren más riesgo de atragantarse que los adultos porque tienen tráqueas más pequeñas y aún están desarrollando sus habilidades de masticación y deglución. Las personas mayores y las que padecen ciertas afecciones que dificultan la deglución también corren un riesgo mayor, sobre todo cuando se trata de ciertos alimentos.

Por eso, uno de los mejores consejos es que los cuidadores estén atentos a los alimentos que provocan atragantamiento. Sirva estos alimentos en pequeños bocados y preste especial atención mientras su hijo los come.

Perros calientes y salchichas

A los niños les suelen encantar estos alimentos fáciles de cocinar, pero esta popularidad hace que los perritos calientes y otras salchichas sean algunos de los alimentos que más se atragantan. Asegúrese de cortarlos en trozos pequeños e irregulares antes de servirlos. Algunos expertos recomiendan cortar los perritos calientes a lo largo para empezar.

Caramelos duros y chicles

Las piruletas y otros caramelos de forma plana son mejores que los caramelos esféricos, como las bolas de chicle, que pueden atascarse fácilmente en la garganta del niño. La mayoría de los expertos coinciden en que mascar chicle no es apropiado para niños menores de 5 años.

Nueces

Los frutos secos enteros pueden parecer una buena opción alimentaria para los más pequeños, pero son uno de los principales peligros de asfixia. recomienda no servir cacahuetes ni otros frutos secos a los niños hasta que tengan al menos 4 o 5 años.

Uvas enteras, zanahorias crudas y manzanas

Los productos frescos y crudos son un tentempié sabroso y saludable. Sólo tienes que acordarte de cortarlos siempre en trozos pequeños, más pequeños de lo que imaginas. Incluso las uvas deben cortarse por la mitad o en cuartos. Así son más fáciles de masticar y es menos probable que se atasquen si se tragan antes de masticarlas del todo.

Palomitas de maíz

El tamaño y la forma de este popular tentempié hacen que sea difícil de tragar para los niños.

Mantequilla de cacahuete

Extienda siempre una fina capa de mantequilla de cacahuete sobre una galleta o una tostada, en lugar de servir una porción grande. La textura puede ser demasiado espesa para que un niño la trague.

Malvaviscos

Sorprendentemente, los alimentos blandos también pueden suponer un alto riesgo. Los malvaviscos son uno de los peligros más comunes, ya que los niños pueden tener problemas para masticarlos completamente.

La mayoría de estos riesgos alimentarios se aplican a los niños pequeños. También es importante tener en cuenta que cualquier alimento -e incluso el agua- puede ser un riesgo para las personas con trastornos de la deglución, por ejemplo después de un ictus. Estos pacientes y sus cuidadores deben consultar con sus médicos qué alimentos presentan mayores riesgos.

Ser consciente de estos riesgos es importante, pero aún así pueden ocurrir emergencias. Por eso nuestro otro consejo es que te informes sobre primeros auxilios en caso de atragantamiento. El Dechoker es un dispositivo innovador y fácil de usar que está disponible en tamaños para niños pequeños, niños y adultos. Creemos que todos los padres o cuidadores de una persona en riesgo de atragantamiento deberían tener acceso a este dispositivo que salva vidas, además de conocer los tratamientos tradicionales contra el atragantamiento, como las compresiones abdominales.

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